La Regenta fue la primera novela de Leopoldo Alas "Clarín" (1852- 1901), escrita entre 1884 y 1885, y es considerada uno de los máximos exponentes del naturalismo y del realismo progresista. La trama transcurre en Vetusta, una capital de provincia claramente inspirada en Oviedo, de hecho, toda la miniserie fue rodada en Oviedo.
La miniserie del 95 me parece perfecta, es de lo más fiel a la novela y la ambientación y el vestuario están de maravilla. Además, Aitana Sánchez Gijón está de diez en su papel, papel por cierto bastante complicado.
La protagonista es Ana Ozores,de familia noble venida a menos que se casa con el regente de la Audiencia, Don Víctor Quintanar, de ahí La Regenta. Mujer de gran sensibilidad y frustrada de sentimientos, se ve involucrada en los tejemanejes de Vetusta, una ciudad hipócrita donde el aparentar es más importante que el ser. Ana se verá en medio de un triángulo amoroso entre el magistral, un sacerdote joven, ambicioso y dominado por su madre y Don Álvaro Mesía, ya de unos cuantos años, galán y hombre de mundo que se propone acabar con la pureza y casi santidad de Anita. Para este complot, Álvaro contará con las amigas de Ana (ten amigas para esto) y de la aristocracia de Vetusta.
Es una novela que me ha encantado, en todos los sentidos, y más viviendo en Oviedo, Vetusta. Cuando Clarín describe a la sociedad provinciana de Vetusta es como si describiese Oviedo a día de hoy. Un adelantado a su tiempo.
Es una de esas novelas que te llegan al alma. ¡Gracias Clarín por escribir una novela tan tan estupenda!
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· “¡Cuidado con el Magistral que sabe
mucha teología parda…!”
-
¡Hora y media de confesión!
-
Le estará contando todos los pecados de
sus abuelos desde Adán.
La Regenta: “¡Oh no, no!, ¡yo no
puedo ser buena!, yo no sé ser buena; no puedo perdonar las flaquezas del
prójimo, o si las perdono, no puedo tolerarlas. Ese hombre y este pueblo me
llenan la vida de prosa miserable; diga lo que quiera don Fermín, para volar
hacen falta alas, aire…”
Doña Paula, madre de
don Fermín: “Tú predicas, tú alucinas al mundo con tus buenas palabras y tus
buenas formas. Yo dirijo el juego.”
Don Víctor Quintanar: “Ana
me engaña Tomás, no hay un solo consuelo. Lo he visto con estos ojos. Álvaro
Mesía entra por las noches en su alcoba. ¿Lo sabías tú acaso?... ¿Qué voy a
hacer Tomás? ¡Qué voy a hacer ahora! Si pudiera parar el tiempo…pero el tiempo
no se para. Yo tengo que hacer algo. Cumplir con mi deber. Anunciar al mundo mi
venganza. Pero me siento tan débil…tan viejo… Ahora no es Perales el que trabaja
¿eh? No es Calderón el que inventa casos de honra. Es la vida. Es mi drama de
capa y espada. ¿Pero cómo podía yo recrearme en aquellas tristezas cuando me
eran ajenas? Me duelen tanto cuando son propias… ¿Por dónde empiezo Tomás? ¿La
mato a ella o a él?
No sirve pa na
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